Preparar a Pasto para la realización de los Carnavales de Negros y Blancos, es un reto que cada año la ciudad asume con suma responsabilidad. Y ello, ¿qué significa? En primer lugar, garantizar que la ciudadanía que quiere jugar en los escenarios carnavalescos, cuente con las garantías necesarias para que cada evento se desarrolle sin dificultad; garantizar también que el público que se da cita para apreciar las obras artísticas y el trabajo de todos aquellos que hacen parte de este evento, puedan circular con tranquilidad y seguridad por las calles, más allá del disfrute y valoración de lo que significa la producción cultural y artística del pueblo pastuso, que se siente orgulloso de su magno patrimonio cultural. Cada proceso, desde el componente cultural, comunicativo, logístico, de contingencia y de gestión, exigieron, como cada año, un trabajo de articulación y coordinación interinstitucional. De acuerdo a Corpocarnaval, en cifras, la versión del carnaval 2020, se sintetiza de la siguiente manera: 50 propuestas fueron recibidas para seleccionar el afiche del carnaval 2020, de las cuales, una fue la elegida por la comunidad, de las 3 que el jurado calificador había seleccionado como finalistas. En esta ocasión, y por primera vez, una mujer nariñense, Ximena Enríquez, quien está radicada en Suiza, fue la ganadora de esta convocatoria.
Para el desfile del 3 de enero, el “Canto a la tierra” y para el “desfile magno” del día de blancos, los cultores y artistas preinscribieron 230 propuestas, las cuales fueron expuestas en las instalaciones de la Gobernación de Nariño, junto al catálogo que, por tercer año consecutivo, dejaba en la memoria lo que la comunidad de artistas le proponía a la ciudad. Cinco fueron los desfiles que en total significó la participación de aproximadamente once mil cultores y artistas del carnaval. En total fueron un millón doscientas mil personas quienes disfrutaron de la lúdica, el color y el arte nariñense. En materia musical, además de las 30 murgas que participaron en el desfile magno, 67 agrupaciones locales, nacionales e internacionales estuvieron en los dos tablados oficiales: Plaza de Nariño y Plaza del Carnaval. Aproximadamente doscientas cinco mil personas gozaron de las presentaciones.
Un carnaval incluyente como es el carnaval de Negros y Blancos ofrece a propios y visitantes el poder deleitarse de manera gratuita de cada uno de los actos carnavalescos. El concepto de inclusión se hace realidad, cuando todas las personas tienen su espacio desde el “estado de bienestar”, donde cada uno disfruta, aprecia y valora lo que colectivamente se ha construido. La inversión realizada para la versión 2020 fue de 6.450 millones de pesos, de acuerdo a la información de Corpocarnaval.
Es un hecho que Pasto ha avanzado en la producción del Carnaval de Negros y Blancos. También es cierto que hay aspectos sobre los que se debe seguir trabajando. Entre ellos, el fortalecimiento del juego carnavalero como elemento central de esta manifestación cultural, lo que significa profundizar en la cultura ciudadana, en el juego respetuoso, toda vez que el carnaval es un espacio que permite a las familias, a los turistas, al que llega solo, o con sus amigos, a compartir y divertirse desde el juego pacífico con respeto y tolerancia. También se hace necesario trabajar en el mejoramiento de la infraestructura de la senda, todo un trabajo institucional que debe trascender en lo social y económico. Así las cosas, se debe continuar trabajando para fortalecer y mejorar lo que hoy tiene nuestra ciudad: un Carnaval de Negros y Blancos de Pasto para Colombia y el mundo, reconocido desde el año 2009 como un Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, declaración otorgada por la Unesco y entregada en Abu Dabi (Emiratos Árabes Unidos). Por lo tanto, lo que viene a futuro es defender y vigorizar el plan de Salvaguardia del Carnaval. Y ésta responsabilidad, sin lugar a dudas, reposa en la institucionalidad pública, en la academia, en el sector privado y, fundamentalmente, en las mujeres y hombres que, cada año le dan vida al carnaval.
